No hay una definición del todo sólida acerca de qué es un showrunner, sin embargo, hay acuerdos acerca de que es la persona responsable de lograr que la historia llegue a buen puerto, de conducir a las distintas cabezas creativas y de producción y de aterrizar los deseos del cliente en el resultado final. En México, esta nueva función llegó hace poco con el arribo de las plataformas, aunque en EE UU hace tiempo forma parte de la dinámica de la creación de series, donde muchas de ellas cuentan con directores distintos para cada episodio. Podría decirse también que reúne las funciones del productor ejecutivo y del guionista. A veces el showrunner también dirige algunos capítulos.
El showrunner (o quien lleva el show) debe proteger el aspecto creativo de la serie, cuidar el presupuesto y suele ser una figura relevante o muy experimentada. Muchas veces participa como escritor, es el autor de la serie o al menos quien creó el concepto. Revela la fuerza que están ganando los escritores en momentos en que la preproducción se hace con extremo cuidado y gana relevancia el trabajo de mayor profundidad y complejidad en la construcción de la historia y personajes.
Además de todo lo anterior, el showrunner debe ser un líder, saber manejar a las distintas personalidades que interactúan en la producción y tener inteligencia emocional para lograr que los distintos aportes y puntos de vista sumen valor al contenido.
Varias escuelas de cine y televisión incorporaron el tema a sus pénsum de estudios, o es parte de talleres o debates. Uno de ellos es el de Centro con su diplomado, El abc del showrunner.
Para Leonardo Zimbrón, jefe de Programación de Ficción de Endemol Shine Boomdog y fundador de Traziende Films, la figura ya existía en México, aunque no se conocía con ese nombre, sobre todo en el mundo del cine, con el llamado productor creativo. “Sin duda es una figura de autoridad que tiene un conocimiento profundo de la historia y de los personajes, al tiempo que es consciente de las reglas de producción bajo las que se hace el proyecto, así como del tono e incluso clasificación que tiene la historia. El showrunner es consciente de todo eso y logra coordinar a todos los equipos creativos. Creo que es un elemento que ayuda mucho, sobre todo en producciones complejas” dijo.
Un ejemplo es la megaproducción Hernán, que realizan Dopamine y Onza Entertainment, y que cuenta no solo con uno, sino con dos showrunners, uno mexicano, Julián de Tavira, y otro español, Curro Royo, que según Fidela Navarro, CEO de Dopamine, resumen el sentido de la historia que es narrar el inicio del mestizaje con la llegada de Hernán Cortés.