
Roberto Irineu Marinho, presidente ejecutivo de Organizaciones Globo, ha destacado que el adelanto de pagos libera garantías que podrían haber limitado los negocios del grupo en el futuro próximo
“No fue un error; fue un acierto. Fue un acierto estratégico en general. Tuvimos dificultades porque apostamos a una estabilidad del mercado brasileño que no se dio y a una oferta de crédito que desapareció. El error fue operativo; la estrategia estaba correcta”, aseguró Roberto Irineu Marinho en un reportaje realizada en la publicación brasileña Tela Viva, refiriéndose a la millonaria inversión realizada por Organizaciones Globo en televisión por cable, que generó serios problemas en las finanzas del grupo y que todavía mantiene comprometida la operación de Net Serviços, la mayor cableoperadora latinoamericana. El mercado consideró ese negocio como el peor yerro de la historia de Globo, una lectura con la que discrepa el presidente y máximo responsable del poderoso conglomerado.”Vamos a continuar siendo una empresa de programación, de producción, de distribución, por cable, por satélite, por cualquier medio. Perder dinero no era parte de la estrategia pero de cuaquier manera hicimos eso para hacer crecer el negocio y siempre tuvimos claridad de que el negocio de TV paga no crecería tan rápido como se proyectaba. Pero era necesario invertir en ese mercado y ayudar para que él se hiciera realidad en Brasil”, sostuvo.Marinho también desestimó que la disminución de la participación en Sky y la venta de participación en Net hubiesen representado virajes respecto al plan inicial de Globo de no ceder espacio en este mercado.”No hubo cambios en nuestra estrategia de TV paga. Fuimos y continuaremos siendo fuertes en programación y producción de contenido nacional. Entramos en la distribución para estimular ese mercado, para que la televisión paga creciera. Si la distribución hubiera estado consolidada desde el inicio esas inversiones no hubiesen sido necesarias”, dijo.