Con un equipo multicultural, como lo fue con Pálpito, se realiza la nueva serie de Leonardo Padrón para Netflix, la cual ya se encuentra en su cuarta semana de producción. Padrón explicó que es multicultural, porque además de estar él, que es venezolano, cuentan con una directora española, un director colombiano, además de una productora argentina, Mariana Iskandarani, entre, como es lógico, muchos mexicanos.
“Es inevitable que ocurra esta suerte de mestizaje cultural en la industria, porque de alguna manera siempre lo ha habido” reflexionó, tras comentar los beneficios que tiene este encuentro, que no solo es cultural sino de conocimientos y prácticas. Padrón es productor ejecutivo de la serie que realiza con la productora Mar Abierto Productions.
“Este encuentro nos permite alimentarnos de la mirada del otro, de otra perspectiva sobre cómo contar historias, para no encorsetarnos en nuestra mirada, como si fuera la única o la mejor. Puede ocurrir efectivamente, como apuntaba alguien en el público, que si no tenemos una batuta adecuada para atemperar tonos y para que el mestizaje fluya de la mejor manera, podría ocurrir que el producto tenga un resultado un poco disonante. Pero en general, lo que hasta ahora he vivido y lo que he visto, es superbeneficioso” explicó.
Leonardo Padrón participó en el foro El futuro de la creatividad: showrunners inspiradores, junto a Berta Prieto, española cocreadora de la serie Autodefensa, la directora y showrunner argentina Lucía Puenzo y el español Borja Soler, guionista y director de Caballo Films, en el marco de Iberseries Platino Industria.
Sobre el tema del mestizaje cultural en la industria recordó que en plantas ejecutivas de canales como Telemundo o Univisión, hay profesionales de distintas áreas de Latinoamérica. “Porque en Latinoamérica tenemos un know how muy poderoso, pues contamos con muchas horas de vuelo haciendo historias para televisión, telenovelas, por su puesto, o cine, entre otras” comentó Padrón.
MOMENTO DE INCERTIDUMBRE
Leonardo Padrón comentó que cada año el mundo del streaming se sacude por una incertidumbre distinta “porque es un producto que está buscando su propio cauce y porque se ido encontrando con contextos socioeconómicos muy distintos” explicó.
Recordó que producir televisión en el momento de la pandemia fue muy distinto y retador, aunque hoy en día el mundo vive tensiones económicas y políticas complejas. “El mundo está raro, complejo, errático. Los televidentes se enfrentan a dos excesos: el de la oferta y el de la incertidumbre. Entonces la audiencia, antes de decidirse por un streaming, se repliega un poco, se ve el bolsillo y hace como una suerte de curaduría personal. Eso determina que las propias plataformas estén revisando muy bien lo que hacen, qué deben producir. Así como la audiencia esta depurando su consumo, las plataformas están depurando su contenido: están tomando decisiones que intentan ser más asertivas, buscando conectar mejor con la audiencia. Y todo esto discurre bajo el signo de la incertidumbre” dijo.
Al explicar la definición de “un contenido rompedor”, comentó que es aquel que va a contravía de lo establecido y que de alguna manera le hace trompetillas a los clichés y a los estereotipos, apostando por una dosis de irreverencia y proponiendo reformulaciones estéticas. “Pero nunca sabemos si lo que hacemos es rompedor. Esto solo se sabe a posteriori. Al decir, “estoy haciendo un contenido rompedor”, no hay mayor arrogancia destinada al fracaso”
LA NUEVA RESURRECCIÓN DE LA TELENOVELA
Leonardo Padrón afirmó que las telenovelas están viviendo una nueva resurrección y se niegan a morir.
“Una de las noticias que más me ha llamado la atención es que HBO Max esté produciendo una telenovela: es algo que no hubiera sospechado, tomando en cuenta el perfil de HBO Max. Que ellos estén girando el periscopio hacia ese género es muy sintomático de por dónde van los tiros de la industria” comentó, para afirmar que según los algoritmos la telenovela es un producto que se consume vorazmente en las plataformas.
“Las telenovelas que hacen los turcos y que hacen los coreanos, con unos valores de producción tremendos, son punto de referencia para que en Latinoamérica revisitemos el género de una manera más ambiciosa, más sólida, y más rompedora” dijo finalmente.