"Sabemos del enorme poder de penetración del sector cultural de EE UU”, advierten los libretistas
Libretistas televisivos colombianos difundieron hoy una carta abierta dirigida el presidente Álvaro Uribe Vélez en la que expresan su preocupación en relación con la próxima ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) y el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA).El comunicado destaca que “20 años atrás los diez principales espacios de televisión eran ocupados por producciones en su mayoría extranjeras” y que a lo largo del tiempo “el talento colombiano logró tomar un liderazgo absoluto entre su público”. Con “historias muy colombianas, impecablemente producidas y actuadas”, prosiguen los libretistas, “nuestra televisión irrumpe en los años noventa en los más importantes mercados del mundo. Se empieza hablar del sello colombiano, reconociéndole su capacidad de innovación. La industria de la televisión en el mundo pone sus ojos sobre Colombia, estudia su estilo y sus posibilidades, y al cabo de unos años nuestra industria, apetecida en una inmensa variedad de mercados, termina convertida no solo en una productora sino en una generadora de contenidos”También subrayan que desde 1998 “el sector televisivo colombiano prácticamente se cuadruplicó en su capacidad, respondiendo con ello a la necesidad de cumplir con el 70% de la cuota de producto nacional exigido por ley en el horario prime, llegando a cumplir finalmente con el cien por ciento, en un esfuerzo comprometido y constante, que respondía al clamor de nuestro público tanto como a la creciente demanda internacional. (…) Nuestras novelas han logrado que millones de personas en el mundo conozcan una faceta nueva de nuestro país diferente a la que muestra de manera reiterada la gran prensa del mundo, de un país conformado exclusivamente por gente violenta. (…) Así, la televisión colombiana ha sido una gran vehículo cultural y masivo, con magníficas proyecciones, que cuenta con el favor de su público y que merece respaldo”.”Sabemos del enorme poder de penetración del sector cultural de EE UU, amparado en su superioridad tecnológica, su capacidad financiera y productiva y la universalidad que gracias a esto mismo han adquirido sus contenidos en el cine, la televisión y la música. Es evidente el peligro que corremos si no hay una muy atenta evaluación de la posición colombiana en la negociación de los acuerdos mencionados. El riesgo que corremos es precisamente ése, que la cultura, soporte de nuestra identidad nacional, reciba en la negociación el tratamiento de otros sectores sin tener en cuenta su especificidad y su tremenda relevancia en la construcción de nuestra realidad”, concluyen los libretistas.