Aspecto de la presentación de la nueva edición del reality en Argentina
Con 26,9 puntos de rating promedio y un pico de 29,6 debutó el último martes, de 10 a 12pm, por la pantalla de Telefé, la tercera versión de Gran hermano, que a diferencia de las ediciones anteriores, los 12 participantes tienen un promedio de edad de 26 años (hay desde 22 a 33 años) e historias de vida acordes a la realidad argentina. Además, ya no hay dos habitaciones, una para chicos y otra para chicas, sino que ahora son mixtas, con cinco camas en cada una. Las dos personas restantes duermen en la “habitación de los reyes” y serán elegidos a través de un mazo de cartas, ya que el primer hombre y la primera mujer en sacar un rey, dormirán allí durante una semana. A eso se suma una sala de intimidad y misterio al que cada miembro de la casa puede ir sólo si es convocado. En esa habitación recibe una sorpresa, pero no debe contar al resto qué pasó dentro de ese lugar.Durante el primer programa más de 300 familiares y amigos se acercaron a los estudios de Teleinde en Martínez (provincia de Buenos Aires) para presenciar el ingreso a la casa de los 12 participantes, que se presentaron en sociedad en cuatro grupos de tres huéspedes cada uno. Los primeros en ingresar fueron Matías Bagnato (24 años y único sobreviviente del asesinato de su familia), Sebastián Spur (24 años y estudiante Administración de Empresas y Matemáticas) y Fernanda Zapata (de 30 años y asistente social). Luego lo hicieron Mauricio Córdoba (22 años, diseñador de lencería femenina que tiene un grupo de rock), Eduardo Carrera (33 años y desocupado) y Viviana Colmenaro (30 años y con un hijo de seis). En tercer término ingresaron Natalia Quintiliano (23 años, promotora y madre de una hija), Pablo Martínez (22 años y estudiante) y Carla Bazán (24 años, tiene un hijo y es cantante). Los últimos tres en ingresar a la casa fueron Analía Barrios (24 años, cajera de un supermercado), Diego Torales (29, empleado administrativo) y Romina Orthustehguy (26 años y promotora).