(Ríchard Izarra, Miami). Marcos Ávila, presidente de Cristina Saralegui Enterprises y esposo de Cristina, confirmó que el show finaliza sus emisiones después de 12 años sin interrupción.“Nos sentimos como si estuviéramos mandando el niño al college”, dijo Ávila a produ.com, quien a la vez aclaró que Cristina sí sigue en Univisión con Cristina especial, que se ha pasado todos los lunes a las 10pm desde 1992.“Hemos llegado a un acuerdo para producir 52 programas especiales de Cristina. Disponemos ahora de un mejor presupuesto y más tiempo para realizarlo”, declaró Marcos este martes al salir de Univisión donde ultimaba los detalles del nuevo convenio. Al cierre de esta edición el contrato estaba en manos de los abogados que lo preparan para la firma.“Creo que ahora sí voy a tener tiempo de jugar tenis en la noche” dijo. Los últimos 12 años de esta pareja han sido bien intensos y llenos de un constante trabajo. Un show diario, un especial semanal y coordinar todos los movimientos del personaje Cristina, con compromisos en la Casa Blanca hasta reuniones con creativos de agencias y corporaciones para lanzar campañas con su imagen, pasando por una revista con su nombre, un programa radial y diversas presentaciones en series de TV en inglés y otros eventos anglos, han tenido a Marcos ocupado y agitado en todo este tiempo. La pasión que le han puesto a Cristina Saralegui Enterprises ha sido la clave del éxito de la empresa, que hasta este lunes 26, tenía 28 empleados. Esa misma pasión y fortaleza es la que ha unido a Marcos y Cristina, cuya historia es una de las más románticas de la industria. Marcos era bajista del grupo The Miami Sound Machine que lanzó a la fama a Gloria y Emilio Estefan y Cristina era editora de la revista Cosmopolitan. Ambos se enamoraron en un momento crucial de sus carreras. A Marcos le estaba llegando el triunfo con el grupo musical y a Cristina la tienta Univisión, para ese entonces de Hallmark al mando de Joaquín Blaya, para que fuera la Oprah Winfrey del mercado hispano. Ambos dieron un giro a sus carreras creando desde entonces sin parar toda la obra de Cristina, cuya última anexión fue Blue Dolphin, un complejo de estudios de TV que construyeron y equiparon en las inmediaciones de Univisión en el noroeste de Miami.Este lunes 26 Ávila reunió a todo su personal para darle la triste noticia: el show concluía, no se renovaba en Univisión, y lo peor, tenía que reducir en casi 40% la nómina.“Cristina está triste”, concedió Ávila. Aunque desde hace tres años venían estudiando y conversando esta posibilidad con los propios programadores de Univisión, el haberlo hecho realidad, afecta e impacta a todos los involucrados.“Bastante generosa” fue la respuesta de Ávila sobre el monto del contrato que por un año firmará con Univisión para seguir con Cristina Especial, programa marcador de buenos ratings.