A propósito de la alianza de Netflix
y Max con Verizon en EE UU, Fernando Gualda, ejecutivo sénior de Media,
Entretenimiento y Deportes de New
Phoenix America, analizó las
motivaciones que impulsaron tanto a las plataformas como a la compañía de telefonía
móvil a dar este paso, así como también el futuro del streaming en el marco de una competencia
creciente e importantes desafíos financieros.
“Verizon, una
de las compañías de telefonía móvil de EE UU, con 143 millones de suscriptores
(personas no hogares), ha lanzado este 7 de diciembre una nueva oferta para sus
clientes móviles. Por US$10/ mes adicionales al plan telefónico, se pueden
incluir las suscripciones conjuntas de Netflix y Max, que normalmente cuestan
US$6,99 y US$9,99 al mes respectivamente por separado,
ahorrando un 40%. Eso sí, este paquete incluye las versiones de ambas
aplicaciones con publicidad.
Este tipo de oferta puede ser más ventajosa en
operadores de telefonía móvil que en los operadores de TV pagada, especialmente
porque en el futuro se podrán combinar con servicios banda ancha móvil para el
hogar, agregándole valor a los usuarios y a su producto de Internet, que cada
vez tiene más ancho de banda.
No se trata
de una asociación entre ambos competidores de OTT, sino una estrategia de
Verizon para ofrecer conjuntamente estas aplicaciones a sus clientes junto a su
paquete MyPlan, probablemente para contrarrestar la pérdida de suscriptores que
se están cambiando a competidores como AT&T y T-mobile, quienes siguen
creciendo.
Esta
estrategia no es nueva, desde el 2019, Verizon ofrece el paquete Disney a sus
clientes MyPlan, que incluye Disney+ sin anuncios, Hulu con anuncios y
ESPN+ con anuncios por US$10/mes. También otros como Walmart+ ofrecen
descuentos al empaquetar con servicios de Apple y/o Paramount+.
Consideramos que los planes de suscripción de Verizon
por familia oscilan entre US$90 y US$100/ mes, un ahorro de US$7/mes con
contratar servicios adicionales por US$10/ mes no sea suficiente para retener
clientes o atraer nuevos clientes, especialmente si implica ver publicidad, que
en el ecosistema digital, las personas no tienen la misma tolerancia o afinidad
con los anuncios publicitarios, que sí tienen en la TV lineal.
EL FUTURO DEL
STREAMING
Las
plataformas enfrentan desafíos significativos al intentar rentabilizar el
contenido ofrecido a sus suscriptores. Esto se debe principalmente a los altos
costos de adquisición de suscriptores, alto costo de compra de contenido, bajas
tarifas de sus planes y a la alta rotación de clientes (churn) en las
plataformas OTT.
El futuro del streaming parece que seguirá creciendo y
evolucionando, con una competencia que probablemente aumentará, llevando en el
largo plazo a la consolidación y eliminación de varias plataformas.
En EE UU, el último informe de Comscore revela que el 41% de los suscriptores de OTT también tiene TV paga, mientras que el 44%
eran suscriptores anteriores de TV paga y un 14% son nuevos clientes sin
historial de TV paga. En contraste, en Latinoamérica, las OTT complementan o se
consideran como un servicio premium a la TV paga.
En Latinoamérica, los suscriptores de TV pagada
continúan creciendo ligados al aumento del PIB per cápita de cada país. El consumo de las OTT en ambos
territorios ha aumentado significativamente, afectando el consumo de la TV
paga, aunque las OTT no han afectado mayormente el consumo de TV abierta, donde
las personas buscan localidad.
El panorama
de múltiples servicios de streaming se vuelve complejo para los consumidores,
desde la administración de las diferentes cuentas y hasta el alto valor que
están pagando, ya que en promedio en EE UU las personas tienen acceso a seis
aplicaciones de pago.
En ambos
territorios, las aplicaciones buscan rentabilidad y retención de usuarios,
aunque las OTT luchan por esta rentabilidad, considerando estrategias como los paquetes con publicidad. Sin embargo, Netflix y la mayoría de las OTT pertenecen
a los mismos estudios productores de contenido, los que han tenido dificultades
financieras notables al romper el tradicional modelo de exhibición en ventanas.
En EE UU, un
mercado más maduro, el crecimiento de las OTT se observa en servicios streaming
con publicidad, el mejor ejemplo es Tubi (hoy grupo FOX), con una penetración
del 18% y un crecimiento anual del 48%.
A pesar de los desafíos financieros, la consolidación entre
estudios productores de contenido y sus aplicaciones parece difícil, como se
puede ver en la reciente adquisición de Disney del 33% restante de NBC
Universal en Hulu, que va en sentido contrario a la consolidación. Sin embargo, a largo plazo, podríamos esperar una consolidación y/o
eliminación de muchas de las aplicaciones, y no deberíamos de sorprendernos que
grandes generadores de flujo de efectivo como Apple o Verizon compren a los
grupos tradicionales de TV y generadores de contenido que vienen con pérdidas
producto de una mala gestión en los últimos años”.