Polka: se corre el riesgo de destruir la competencia efectiva en el mercado de distribución de TV paga
Un nuevo estudio económico realizado esta semana por la Asociación Americana de Cable (ACA) indica que los consumidores pagarán durante los próximos 9 años al menos US$2.400 millones más por servicio de TV paga, como resultado del poder de fijar precios sin restricciones que emanará de la combinación de Comcast Corp. y NBC Universal, una transacción de medios sin precedentes que aún está a la espera de la aprobación de las autoridades regulatorias, la Comisión Federal de Telecomunicaciones (FCC) y el Departamento de Justicia.Es claro que la negociación Comcast-NBCU generará facturas mensuales de TV paga más altas por miles de millones de dólares en la próxima década, acentuando la visión de ACA de que los reguladores deben proteger a los consumidores y a la competencia de una transacción cuyos beneficios son superados por sus daños. Sin condiciones significativas y costo-eficientes sobre la transacción Comcast-NBCU, los reguladores corren el riesgo de destruir la competencia efectiva en el mercado de la distribución de TV paga apuntó Matt Polka, presidente y CEO de ACA.El estudio de ACA fue elaborado por William Rogerson, profesor de Economía en la Northwestern University, quien se desempeñó como jefe economista de la FCC durante el período 1998-1999.El estudio de Rogerson concluye que la transacción permitiría a Comcast-NBCU incrementar las tarifas de programación muy por arriba de los niveles que ambos separadamente y como empresas independientes hubieran logrado. Estas tarifas serán transferidas en su mayoría a los abonados en la forma de precios más altos de suscripción. De acuerdo a Rogerson, el daño cuantificable para el suscriptor producto de esta transacción (US$2.566 millones) es 10 veces mayor que el beneficio cuantificable (US$204 millones) que argumenta Comcast-NBCU.