En los últimos años fue una de las empresas más comprometidas financieramente en el mercado de la televisión. Un golpe de timón en su administración y la venta de los derechos televisivos de Fórmula Uno al Grupo Kirch fueron claves para que EM.TV lograra sobrevivir. Su informe financiero 2001, divulgado en las últimas horas, muestra una reducción de las pérdidas brutas de 75%, hasta alcanzar 331 millones de euros. Las ventas durante el pasado año llegaron a 722 millones de euros, 10% más que en el 2000. El Ebitda alcanzó 286 millones de euros, siete veces superior al ejercicio anterior. La actual administración del grupo estima conseguir beneficios dentro de los próximos dos años.