CableVisión de Argentina difundió el pasado martes 21 un comunicado titulado CableVisión defiende su servicio y sus fuentes de trabajo. La comunicación informa que tras la ocupación de la empresa por Gendarmería, CableVisión lleva adelante diversas acciones para proteger sus derechos y los de sus clientes.Como en agosto del año pasado, cuando el Gobierno proclamó que Fibertel no existe más e intentó decretar ilegalmente la caducidad de su licencia, CableVisión está llevando adelante todas las acciones legales pertinentes para defender su integridad y la prestación de sus servicios tal como lo viene haciendo hasta el día de la fecha. En el día de hoy (por el miércoles 21 de diciembre) CableVisión ha recusado con causa por prejuzgamiento al juez Walter Bento y ha formulado una denuncia penal por abuso de autoridad. La compañía además denunció penalmente a quienes participaron de este procedimiento, entre ellos el abogado del Grupo Vila Manzano, Eduardo Vila, y a varios agentes de inteligencia privados.A esta altura ya no quedan dudas de que la maniobra impulsada por el Grupo Vila Manzano en un juzgado incompetente de la Provincia de Mendoza resultó idéntica en su finalidad y oportunidad a la estrategia que viene desplegando el Gobierno a través del Afsca para intentar caducar las licencias de CableVisión. La utilización de un grupo mediático afín, que se vio beneficiado este año con un incremento del 700% en publicidad oficial (más de $50 millones), resultó claramente funcional a ese objetivo.Los graves hechos del martes (20 de diciembre) revelan una sugestiva similitud con la resolución 100/10 de la Secretaría de Comunicaciones, que pretendía, en un plazo de 90 días, dejar sin servicio a todos los usuarios de Fibertel. En este caso se busca algo aún más grosero y de imposible cumplimiento: desguazar en 60 días CableVisión, desconociendo las autorizaciones oportunamente otorgadas por el Gobierno Nacional, los derechos adquiridos de sus clientes de televisión e Internet y las fuentes de trabajo de sus más de 9000 empleados.Los argumentos utilizados por el Grupo Vila Manzano son falsos e inconsistentes, pero además CableVisión no tuvo siquiera la oportunidad de defenderse de ellos ante la Justicia. Jamás el Grupo Vila Manzano denunció a CableVisión en el organismo competente, como es la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia. Sí prefirió apelar al mecanismo del forum Shopping para lograr una medida arbitraria y absolutamente desproporcionada como intervenir a la compañía.Curiosamente, el Grupo Vila Manzano parece desconocer que su participación de mercado es superior a la de CableVisión en las localidades donde opera porque en su gran mayoría no tiene competencia alguna.Lejos de tener una posición dominante, la participación de mercado de CableVisión en la Argentina (47%) es igual o menor a la de los principales operadores de TV paga de los países de la región y el mundo como Perú (82%), Chile (67%), Venezuela (50%), México (46%), Brasil (46%), Italia (75%), Francia (65%), Reino Unido (59%), España (57%) o Alemania (52%).CableVisión compite con uno, dos o más prestadores de TV paga (por cable o por satélite), en todas las ciudades donde opera. Lo hace palmo a palmo con prestadores locales, nacionales y regionales de televisión y de Internet. Entre ellos, con las dos grandes telefónicas multinacionales, que sí son monopólicas. Es una empresa de capitales argentinos, que en los últimos 4 años invirtió 1.000 millones de dólares para tener la más alta tecnología a nivel global, que le permite ofrecer servicios como HD, video on demand, y el servicio de banda ancha de mayor velocidad de la Argentina. Una empresa que trabaja para ser elegida cada día por cada uno de sus clientes.