Canacine predice un repunte del cine mexicano en taquilla durante el segundo semestre de este año, tras la primera semana de estreno de El candidato honesto y los buenos lanzamientos que están previstos para los próximos meses. Sin embargo, aún quedan retos por saldar, y así alcanzar los niveles previos a la pandemia o más. La reflexión es pertinente en el marco del Día Nacional del Cine Mexicano, fecha en la que habría que trazar objetivos de corto, mediano y largo plazo para fortalecer y consolidar a la industria, según Avelino Rodríguez, presidente de Canacine.
Rodríguez explicó a PRODU que el cine mexicano se mantiene este año con una participación en el mercado del 3,37% de la taquilla total, lo cual va a variar a final de año, tras las cifras registradas por El candidato honesto. “Puede que se nivele al 5%, que fue lo alcanzado el año pasado” explicó. Sin embargo, aún no se llegará a la participación del cine mexicano en taquilla antes de la pandemia, que rondaba el 13%.
¿CÓMO SALDAR LA BRECHA?
Rodríguez comentó que la industria audiovisual debe construir las estrategias que le permitan alcanzar el doble dígito de participación en el corto plazo, es decir, en tres años al menos.
“Antes del cambio de hábitos de consumo por la pandemia, había un porcentaje alto de películas con componentes comerciales que les permitían tener mejores desempeños en cines. En el momento en que muchas de esas películas empezaron a ir directamente a plataformas, y mucho del talento creativo de esas películas se empezó a dedicar únicamente a hacer series, se comprometió el componente comercial de las películas que llegan a las salas” dijo Avelino Rodríguez.
Aunque ha crecido el volumen de películas mexicanas en las pantallas de cine, no son películas con los mismos componentes comerciales o de películas de género similar. “Estuvo todo este momento con varias comedias, después de varias películas de terror. Ahora, la oferta ha bajado y hay más diversidad y no cuentan con los componentes comerciales” explicó.
Una de las claves del éxito de El candidato honesto fue el número de salas en las que fue exhibida, junto a la campaña de marketing que se realizó. “Hace mucho que una película mexicana no estrenaba con más de dos mil pantallas” apuntó el presidente de Canacine, tras acotar que el éxito en taquilla no solo es un asunto de los productores, sino también de los distribuidores.
REDEFINIR ESTRATEGIAS
Para Rodríguez, la etapa pospandemia obliga a pensar en nuevas estrategias de exhibición, pues ciertamente han cambiado los hábitos de consumo en cines.
“Una inversión poderosa en marketing, como tuvo El candidato honesto, genera oportunidades. En las películas mexicanas vemos una desvinculación importante entre el porcentaje de inversión en la película y en el marketing, cuando en el mercado de EE UU vemos que el 40% de producción se destina al marketing” dijo, tras comentar que este fenómeno se veía también antes de la pandemia.
Comentó que tras la desvinculación de fondos públicos para el cine comercial, se incrementó muchísimo el riesgo financiero en las distribuidoras, por lo que empezaron a tener menos lanzamientos e invertir menos en marketing, con el fin de poder mantener la calidad y el volumen. “Se empiezan a ver ciertas fracturas en el ecosistema y en el ciclo económico que se había creado, lo que empieza a precarizar el mercado”.
La situación que cambia ahora es que los próximos estrenos vienen con mejores componentes comerciales, como son Caras vemos, distribuida por Sony Pictures México, y Casi el paraíso, distribuida por Cinépolis Distribución.
Caras vemos es protagonizada por Mariana Treviño y Bruno Bichir, dirigida por Beto Gómez, y estrena la próxima semana, mientras que Casi el paraíso, dirigida por el cineasta Edgar San Juan y protagonizada por Esmeralda Pimentel, Miguel Rodarte y Karol Sevilla, estrena en septiembre.
AUMENTA EL NÚMERO DE PELÍCULAS
En lo que va del año se han estrenado 97 películas mexicanas, y está previsto el estreno de otras 32, en lo que queda del 2024. Eso suma 129 películas.
“Existe una falsa percepción respecto al número de estrenos mexicanos. El cine mexicano tiene un muy buen porcentaje de participación en los estrenos, el tema es cómo podemos hacer una reflexión conjunta para capitalizar mejor las oportunidades” dijo Rodríguez, tras comentar que el número de películas estrenadas antes de la pandemia era similar, pero con distribuidoras claves con mayor volumen de películas. “Una distribuidora como Videocine podía tener un estreno cada dos semanas. Ahora distribuyen menos volumen, porque tienen menos recursos. Son tiros más de precisión que de volumen” explicó.
Avelino Rodríguez concluyó que el volumen de producción ya está generado, la conversación sobre el tema del marketing ya está sobre la mesa, y hay síntomas de que las audiencias cuando conectan, van al cine.
“Hay que pensar en cómo segmentamos los proyectos que a nivel de industria producimos, lo cual puede ayudar a comparar cine de alto desempeño comercial, para medirlo año con año, el cine de festivales (cuántas se hicieron y sus resultados) y cómo se ve el cine cultural, el cine indígena, el experimental. Hay información con la que podemos hacer evaluaciones, pero falta información en cuanto a volúmenes de inversión y capacidades de las empresas. Lo positivo es que empieza a tener lugar una conversación más sofisticada, donde todos los tipos de cine mexicano empiezan a tener una cabida desde una perspectiva de desempeño y no todo el desempeño hay que medirlo en lo económico” explicó.
Según Avelino Rodríguez, esta conversación, de tener lugar con seriedad, tendrá resultados con propuestas de impacto económico, cultural, de gobierno. “En cuanto al cine mexicano como tal, creo que hay que trazarse objetivos. ¿Nos queremos medir contra Corea, nos queremos medir contra Italia, contra qué cinematografía nos queremos medir, que pudiera ser comparable a la nuestra? De esta manera podremos esperar cómo en un esfuerzo de industria empezamos a llegar a esos objetivos”.
Por allí, afirma, tendría que ir la reflexión el Día Nacional del Cine Mexicano.