
CableVisión de Argentina lanza concurso para organizaciones con fines sociales
La compañía argentina de TV por cable Cablevisión anunció este miércoles que concluyó la reprogramación de su deuda de US$796 millones y que usará hasta US$114,4 millones en efectivo para cancelar pasivos.La firma, controlada por filiales de Hicks, Muse, Tate & Furst y de Liberty Media International, señaló en un comunicado recogido por Reuters que ya obtuvo “autorizaciones y compromisos para la firma del Acuerdo Preventivo Extrajudicial por un número de tenedores y por un monto de deuda suficientes” para dar por aprobado el pacto.Cablevisión lanzó en septiembre del 2003 una oferta para reprogramar sus pasivos, que debió mejorar en febrero del 2004 para acercar posiciones con los acreedores y lograr la adhesión requerida por ley, de por lo menos la mitad más uno de los acreedores y de las dos terceras partes del monto de deuda.La oferta consta de una recompra de deuda en efectivo con una reducción del capital del 60%, con lo que la compañía cancelará US$286 millones con US$114,4 millones.”Los accionistas que aportan capital son compañías afiliadas de Hicks, Muse, Tate & Furst y de Liberty Media International, que mantendrán el control de CableVisión una vez completada la reestructuración”, señaló el comunicado. Los accionistas, que en la actualidad poseen el 50% de la compañía cada uno, también ofrecen canjear otra parte de la deuda con US$60 millones con acciones, equivalentes al 20% del capital accionario.El resto de los pasivos se pagarán con nuevos bonos, uno a 10 años por US$235 millones, que posterga los vencimientos pero mantiene el capital inicial de la deuda. Un segundo bono, de US$150 millones a siete años, contiene una quita del 30%, con lo que cancela deuda contraída por US$215 millones.Una fuente de la compañía explicó a Reuters que la empresa no reconoce en la renegociación unos US$250 millones en intereses vencidos y en penalidades por la no cancelación de vencimientos de capital desde la cesación de pagos.Cablevisión se encuentra en cesación de pagos desde febrero del 2002. Al 30 de septiembre del 2003 registraba 1,2 millones de abonados, ingresos por 485,1 millones de pesos (casi US$167 millones) y una utilidad neta de 184,5 millones de pesos (más de US$63 millones), desde una pérdida de 1.530,1 millones (aproximadamente US$525 millones) del mismo período del año anterior.