Recientemente el término preponderancia en México ha tomado fuerza y es un elemento determinante en relación con los futuros negocios para las dos principales empresas del país en cuanto a TV abierta y paga (Televisa) y telecomunicaciones (América Móvil), los cuales han manifestado su oposición a los señalamientos del IFT.
Sin embargo, de acuerdo con The Competitive Intelligence Unit (The CIU), en términos generales se identifica un nuevo ecosistema de contenidos audiovisuales con niveles crecientes de competencia en la oferta de generadores y distribuidores que buscan de contenidos con las preferencias de los consumidores. “Ello ha permitido el crecimiento de otros canales de acceso a contenidos audiovisuales en los últimos tres años”.
A partir de la entrada en vigor de las reglas de Must-Carry/Must-Offer —que eliminaron una importante barrera a la competencia en TV paga, la compartición de infraestructura pasiva del operador preponderante que habilitó la entrada oportuna de la nueva cadena de TV, Grupo Imagen, así como el aumento en la oferta de canales y contenidos transmitidos con la transición a la TDT—, es un hecho que los avances en materia de preponderancia en los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión son contrastantes.
“Se puede concluir que la configuración competitiva y condiciones de mercado en telecomunicaciones siguen siendo similares después de tres años de la intervención regulatoria de preponderancia, en el sector de radiodifusión se han consolidado cambios sustanciales en beneficio de los consumidores, los competidores y, especialmente, de la competencia efectiva” concluye The CIU.