Para Mario Carrasco, socio de ThinkNow Research, la llamada “economía de la empatía” va más allá de las campañas de marketing, como la concibe Michael Ventura, autor de Applied Empathy. Esta debe tocar el liderazgo empresarial, la cultura, la gobernanza y la ética, la percepción de la marca y el valor contable. “La empatía se ha vuelto tan esencial para el éxito empresarial como los productos y servicios que ofrece una empresa” escribió en una columna en MediaPost.
Carrasco dice, además, que según la consultora británica The Empathy Business, la empatía es una métrica cuantificable y que ha demostrado su beneficio para las empresas. Esta medición se usó en 2016 para crear un índice donde se clasificaron a las 20 empresas más empáticas, y se demostró que las diez primeras aumentaron su valor más del doble que las diez últimas y generaron 50% más de ganancias.
La diversidad y la inclusión son parte integral de la “economía de la empatía”, incluso “es la pieza más crítica”.
Aunque se crea o no en el concepto de la “economía de la empatía”, una cosa sí es cierta: “La adopción de prioridades de diversidad e inclusión es fundamental para su organización. No solo es una obligación moral, sino un imperativo empresarial” dijo.