
Ricardo González
ALMA presentó su más reciente trabajo para Sprint titulado  Como la mía, presentando al emblemático grupo español de los años 80,  Locomía, interpretando una versión única de su famosa canción Locomía. 
     
    “Siendo este el tercer comercial de la trilogía con temas  musicales que planeamos hacer para Sprint, nos pareció pertinente continuar  reviviendo canciones bien icónicas de la memoria colectiva de los hispanos. Y  así, seguir conectando de una manera más genuina y divertida. Buscamos  canciones que nos permitan incorporar en ellas el mensaje de venta de la marca  de una forma orgánica y empática” explica Juan Diego Guzmán, director sénior  creativo de ALMA, 
     
    Para el primer comercial sobre datos ilimitados usaron el  concepto de Data loca, y usaron el tema original de La vida loca con un twist en su instrumentación. Para la promoción navideña de 50%, cuenta Guzmán que se  les ocurrió desear una Feliz la mitad, y fue ahí donde el tradicional tema de  José Feliciano, Feliz navidad. Y para este tercer comercial buscaban despertar  el orgullo de estar no con cualquier compañía, sino con una que sientes como  propia, “pues nos decantamos con el lema de campaña: Como la mía. Y fue justo  ahí, que por una conexión fonética y de rima casual se dio lo de invitar a los  de Locomía para llevarlo a la vida”.
     
    Señala que la música es definitivamente un canal cuyos  códigos permiten romper el hielo y abrir un espacio para ser más receptivos a  cualquier tipo de mensaje; especialmente en una categoría como la de la  telefonía móvil, donde la comunicación gira en torno a una guerra de precios y  ofertas. 
     
    “De empezar adaptando comerciales en un estudio en LA,  pasamos a crear contenido original y dedicado para nuestro mercado en lugares  como Ciudad de México, Tulum, Las Vegas, Nueva York, Lisboa, Madrid y finalmente  en Kiev. Allí fue donde grabamos el comercial Como la mía, el cual tuvo un ‘cast’ bien único. Como anécdota muy pocas veces se puede decir que  estuviste en un circo ucraniano, con luchadores exsoviéticos, Paul, los  mismísimos Locomía, y con cientos de extras ucranianos cantando y bailando esta  canción en castellano. Una muestra más de que la influencia latina no conoce  fronteras. Algo que en esencia buscamos con nuestros trabajos para Sprint”.