Gustavo Razzetti, director general de LAPIZ, escribió en su blog un artículo titulado, Don’t Sell Your Passion For Free. La reflexión se basa en la importancia que le dan las personas al dinero y cómo esta percepción es muchas veces limitante de la creatividad y de nuevas oportunidades.
“El dinero se ha convertido en una moneda emocional, que en las empresas se relaciona directamente con la autoestima. Obviamente obtener un buen sueldo es gratificante. Pero el desafío se encuentra en que la mayor parte de la fuerza de trabajo ve el dinero como la principal fuente de reconocimiento” señala en la publicación.
A lo largo de su carrera, Razzetti ha intentado convencer a la gente de que no pongan el dinero por delante. “La prioridad debe enfocarse en el aprendizaje y construir las bases adecuadas para el futuro, en vez de obsesionarse con el próximo aumento”.
Su consejo más grande es: “no dejes que el dinero decida por ti. Recibir un buen cheque por hacer un trabajo que no te desafía lo suficiente no te ayudará a aliviar la frustración personal. De hecho, algunos de los trabajadores mejor pagados en EE UU son bastante miserables en sus empleos” destaca.
Para el creativo, está bien tomar un nuevo camino profesional, sin que el dinero sea una excusa. “Si quieres hacer algo, hazlo. Ajusta tu estilo de vida, reduce tus gastos, hasta llegar a donde quieras que llegar. Es mejor sacrificar cosas pequeñas a corto plazo que posponer tu felicidad por siempre”.