(Maribel Ramos-Weiner). El acuerdo que Televisa firmara en días pasados con Telemundo ({ver info. relacionada;http://produ.com/television/index.html?Noti=62411&year=2004/2005}) para distribuir el contenido de la cadena filial de NBC Universal en México se ha prestado a varias hipótesis. Por un lado ciertos analistas del mercado de TV refieren que este paso acerca a Telemundo al gigante mexicano en EE UU ya que, de Televisa lograr romper legalmente su convenio de contenido con Univisión –lo que se decidiría en la Corte de Los Ángeles el próximo 29 de abril, necesitaría un socio para su contenido en el mercado hispano. Otros analistas consideran que esta negociación representa una nueva derrota para Telemundo en sus aspiraciones de ingresar a competir directamente en el mercado de la TV mexicana. Ya que al cambiar de opinión el gobierno mexicano, que había anunciado que abriría la competencia para un tercer operador de TV abierta –muchos opinan que por el cabildeo de Televisa y TV Azteca- echó por tierra los planes de NBC Telemundo de competir en ese mercado. Julio Rumbaut, titular de Rumbaut & Co., señala que “Televisa es el gran ganador en el negocio con Telemundo. Telemundo nuevamente ha sufrido una derrota al no conseguir entrar en México con un modelo de negocio que lo hacía no sólo productor de su contenido, sino también su distribuidor. Sin embargo Televisa logra con esto dos cosas: Dejar entrar en el mercado a una de las compañías de TV más grandes del mundo y, a la vez le tira una rama de olivo al Gobierno mexicano y le dice ‘estamos dispuestos a trabajar con competidores’, claro, pero controlados por ellos. El negocio de distribución de Telemundo en México tiene un éxito limitado dentro de un grupo líder que existe en el país”.Por otra parte, algunos analistas son de la opinión de que volver a ser suplidor exclusivo de contenido de una cadena en EE UU no está dentro de los planes de Televisa si llega a liberarse del contrato con Univisión, “sino que buscará vender su programación a todos los interesados para multiplicar sus ingresos”, como apunta un cable de Reuters.“Si Televisa puede romper el contrato de Univisión en la Corte hay dos temas importantes: Gane quien gane, va a haber una apelación. Una apelación en la Corte de Los Ángeles se demora fácilmente un año, quizás dos. Éste va a ser un cambio paulatino. Lo segundo es, y ésta es mi opinión, que Televisa no quiere pasar de ser un suplidor de Univisión a ser uno de Telemundo. Televisa quiere utilizar su contenido, que es una moneda sumamente fuerte, para ser dueño y socio de una cadena de TV en EE UU”, agregó Rumbaut. Para finalizar, ante la cercanía de los Upfronts, no existe preocupación de que Univisión se encuentre en apuros con los anunciantes debido al juicio con Televisa y cuál pudiera ser el resultado final. “El anunciante no puede especular lo que va a hacer hasta que pase algo. Primero, la decisión de la Corte va a tomar meses de juicio, segundo, la decisión de la Corte va a ser apelada y por último, un cambio no sería inmediato. Los anunciantes van a comprar la audiencia que ellos vean en el momento correcto”, comentó Rumbaut.