La demanda de contenidos para plataformas alternativas a la tradicional televisión es sin duda algo que crece, e inevitablemente vamos camino a ingresar de pleno en un concepto de televisión distinto al que todos estamos acostumbrados.Lo interesante es que se piden todo tipo de contenidos, porque el target es muy amplio y hay que tener material para todos los gustos. Sin embargo, los públicos joven y joven adulto siguen siendo los principales consumidores de este tipo de televisión.En términos de negocio económico, para nosotros que somos proveedores de contenido, aún es difuso. Solamente resultan atractivos los negocios de volumen. De todas maneras, como parece ser que ése es el futuro de la televisión, el desafío para los distribuidores tradicionales será ganarse un espacio o construir un esquema en que seamos más que simples proveedores. Definitivamente no podemos aplicar los parámetros que hemos venido usando en la distribución tradicional. Una vez más, ser flexibles y creativos continúa siendo la receta para lograr éxito en la industria.