María Celeste Arrarás: uno de los primeros casos de “contrato bilingüe” (Foto: F.Cuevas/Univision.com)
(Ríchard Izarra, Miami). Aunque la salida de María Celeste Arrarás de Univisión, la exitosa presentadora de Primer impacto, fue imprevista y sorpresiva para la industria de la TV hispana, su retiro de la empresa lo había estado pensando durante casi un año. La razón principal: sintió que su crecimiento y desarrollo dentro de Univisión habían llegado a su límite.En declaraciones a produ.com, Arrarás aclaró los buenos términos de su separación de la cadena a la que entró en 1988 como reportera en el Canal 41 de Nueva York. El impacto se debió a que casi nadie se retira de Univisión, y cualquier baja es motivo de asombro y especulación, sobre todo cuando ha pasado que grandes figuras han dejado una cadena para comenzar al poco tiempo en otra de la competencia.Sin embargo, el caso de esta periodista puertorriqueña tiene otro motivo: La carrera de ascenso que siempre tuvo desde que entró en el Canal 24 de Puerto Rico, haciéndose una estrella y ganando premios, luego su labor destacada en el Canal 41 que la promocionó al cargo de jefa del buró de Noticias de Los Ángeles, hasta su traslado y mejores posiciones logradas en Miami, se truncó en los últimos años en Primer impacto, según sus propias expectativas. Señaló que lo planteó a sus superiores en varias oportunidades y hasta pensó que se podía alterar el formato del programa para darle cabida a otros retos por realizar, pero entendió que la propia estructura de la empresa le impedía cualquier avance. Finalmente decidió dar el paso y dejar la compañía por su propia decisión. A pesar de la relación excelente que deja atrás con Univisión, Arrarás concede que si se le hubiera hecho caso y tomado en serio sus peticiones en su debido momento, otra hubiera sido la situación. “Es como cuando un hijo se queja y se queja de algo y uno no le hace caso, y de repente reacciona de tal forma que le hace comprender a uno que él tenía la razón”. En su caso dio a entender que a última hora sus jefes reaccionaron, pero ya era muy tarde.“Cuando tomo una decisión, la tomo y la sigo. Es cuestión de dignidad, que es lo único que al final queda” dijo.Sin dar una pista de cuál sería el próximo paso, Arrarás visualizó su futuro en TV, en Miami y en algún proyecto exitoso.El representante de María Celeste es Raul Mateu, William Morris Agency, T +1-212 903-1568, Nueva York.