Cada feliz año es como otro comienzo, y cada día de la vida debe ser digno de un nuevo inicio, cargado de positivismo y esperanza.
Por eso desde hace ya más de treinta años saludo cada día de la vida a las personas con un Feliz año, una fuerza motora espiritual que rompe la monotonía y busca la felicidad.
La actitud y la novedad son dos de las más poderosas energías de la evolución humana. Un Feliz año para un martes 30 de abril cae tan bien y es tan poderoso como un tradicional primero de enero. Es un tema de actitud contagiosa por encima de una fecha en el calendario.
Desde el origen de la cuarta revolución industrial declarada en Davos en el Foro Económico Mundial hace aproximadamente 13 años, nuestra industria ha entrado en un proceso de “Feliz año”constante que se mueve a una altísima velocidad.
Este 2024 no será la diferencia. El planeta girará más rápido y nuestra industria también lo hará. El péndulo se seguirá moviendo y aquí tres puntos para considerar para el tiempo venidero:
1. La consolidación de los Holdings.
Veremos sin duda el debilitamiento de las redes de comunicación pues los holdings adquirirán el control, la relevancia y las tomas de decisión integrales de cara a los grandes clientes. Si durante muchos años vimos la competencia entre redes globales ahora veremos
la lucha entre holdings.
Incluso muchas de las marcas de las redes que conocimos y con las que crecimos desaparecerán, se desvanecerán o se fusionarán en este proceso.
Los holdings serán contundentes con todos los temas relacionados con los medios y el marketing de precisión. Hacia allá se moverá su foco. La creatividad dejará de ser el centro de la industria para ellos.
2. El tiempo de los Independientes.
Al moverse el péndulo de los holdings hacia los medios y el marketing de precisión, se abrirá una oportunidad humana de la creatividad que será aprovechada por las empresas independientes que tienen su centro en la creatividad como foco principal. Estas compañías se comenzarán a asociar con empresas nuevas de tecnología que buscarán una cara conjunta de narrativa emocional. Las marcas bípedas, aquellas que logren sumar el storytelling y la tecnología encontrarán un caldo de cultivo para su crecimiento, su desarrollo y su relevancia. Muchos clientes buscarán este tipo de compañías para resolver sus necesidades de negocio. Esta oportunidad durará un tiempo específico mientras el péndulo de los holdings vuelve a retornar y a darle a la creatividad su verdadera importancia como el centro del sistema.
3. La Inteligencia Artificial triunfará de la mano de la emocionalidad.
Ya hemos venido escuchando los rumores del fin de la industria debido a la aparición disruptiva de la inteligencia Artificial (IA). Sin duda su afección será muy fuerte y este año en la gran feria CES en las Vegas se augura después de varios años de estancamiento tecnológico una poderosa sacudida con este tema que ronda por todos lados.
No creo que la Inteligencia artificial sea una herramienta, veo más un completo ecosistema que de la mano del ser humano logrará cambiar el modelo de nuestro negocio.
Se generará una sustitución laboral de muchos puestos de trabajo promedio, pero donde los mejores se enaltecerán y sus resultados serán aún más evidentes. Será mejor para pocos, será peor para muchos. La llave entre la inteligencia artificial y la inteligencia emocional será la nueva clave del éxito.
Toda incertidumbre trae su bondad, todo problema trae su oportunidad. En eso se basa la evolución y entenderla y asumirla consolida su éxito y su energía. Merecerla está en confrontarla, como un feliz año deseado desde cualquiera de los 365 días del calendario.
Para todos y por lo que viene, Feliz año.
Por
Juan Carlos Ortiz