La Guía de sostenibilidad para el sector audiovisual es un documento que tiene como objetivo promover la realización de producciones amigables con el medio ambiente. Su creación vino como resultado de una consultoría realizada en 2022 por la Comisión Fílmica de Bogotá y el Instituto Distrital de las Artes de Bogotá (Idartes) con Mrs. Green Film, empresa española especializada en producciones sostenibles.
El texto aporta algunos datos que permiten dimensionar el impacto de la industria fílmica en el entorno. Por ejemplo, señala que un rodaje de cinco días genera aproximadamente ocho toneladas de dióxido de carbono, 20 mil botellas de agua y representa 27 mil kilómetros en desplazamientos del equipo base. Explica que el transporte de materiales y el uso de energía en el set propician emisiones de CO₂ a la atmósfera. Asimismo, una producción conlleva una generación de residuos transversal a todos los departamentos.
Debido a eso, la guía ofrece distintos tipos de recomendaciones, desde las más sencillas de implementar hasta unas más complejas, con la intención de que cada compañía del sector audiovisual en Bogotá pueda conocerlas e implementarlas en los próximos tres años y puedan aplicar a certificaciones de sostenibilidad.
Entre las sugerencias generales que da el archivo está la de minimizar la impresión física de documentos y hacer uso de aplicaciones digitales para el manejo de guiones, reduciendo así el uso de papel. También recomienda garantizar la disponibilidad de contenedores para el reciclaje de dicho material.
Por otra parte, aconseja hacer uso de energías limpias para limitar las emisiones de los generadores en la medida de lo posible y evitar el uso de iluminación no esencial como la decorativa y aquella en áreas desocupadas. Otra medida puede ser comprar modelos de computadores, monitores e impresoras con buenas calificaciones de eficiencia energética que puedan cambiar al modo de ahorro de energía cuando no estén en uso.
Según el contenido, prácticas como cerrar el grifo cuando no se esté utilizando activamente el agua contribuyen a un uso eficiente de dicho elemento. Desalentar el uso innecesario del aire acondicionado o de calefacción también se encuentra entre sus directrices.
Otra propuesta que esboza el documento es la de contar con instalaciones adecuadas para la separación de restos de papel, vidrio, aluminio, plástico, cartón y baterías. Asimismo, aboga por sensibilizar al personal sobre la disposición correcta de residuos regulares, peligrosos y de manejo diferenciado que se generan en el set de filmación.
En un apartado la guía informa que proporcionar productos reutilizables, reciclables y/o biodegradables, en lugar de espuma de poliestireno, productos plásticos y otros materiales perjudiciales puede ser de gran ayuda para el planeta.
Del mismo modo, da una serie de consejos específicos para el departamento de producción como transportar al equipo artístico y técnico en vehículos eléctricos o híbridos, así como priorizar contratistas y proveedores que cuenten con un plan de gestión para la correcta separación de residuos aprovechables y no aprovechables.
En cuanto al servicio de catering, plantea fomentar el uso de cubiertos, platos y vasos reutilizables y comprar alimentos cultivados localmente para ayudar a compensar las emisiones de gases de efecto invernadero asociados con el transporte de la comida.
Por último, en lo concerniente al arte y la utilería, recomienda hacer una disposición responsable de los sobrantes de pinturas y otros materiales peligrosos, por ejemplo, devolviéndolos a sus proveedores o almacenándolos para un uso posterior. Sobre la parte del vestuario sugiere reparar, adaptar y arreglar prendas usadas reduciendo la compra de prendas nuevas. Algunas medidas adicionales pueden ser instalar bombillos de menor gasto energético y mayor eficiencia como lámparas fluorescentes.
