“La estrategia de Sony Pictures Television de consolidarse como estudio independiente nos permitió desarrollar proyectos más orientados a la creatividad que a las pantallas propias” sostuvo Ana Bond, VP sénior y directora general de Producción Internacional de SPT Latinoamérica.
Es así que en LA Screenings la compañía lanzó varias producciones originales. Entre ellas: Rio connection (ocho capítulos), una coproducción con Floresta y Globo que transcurre en los 70 y es la primera producción de Sony en Brasil. “Es un producto internacional, en inglés, con impronta brasileña, que está para competir con cualquier contenido de impacto global” puntualizó Bond.
Otros lanzamientos fueron Código implacable (10 episodios), un thriller mexicano y la primera coproducción con The Mediapro Studio, y en la que también participó Claro video; Reputación dudosa (temporadas de ocho capítulos), un melodrama con comedia dirigido por el mexicano Álvaro Curiel; y Túnel del amor, un dating show desarrollado por Floresta de Brasil que estrenó en Multi Show y se mantiene en el top ten de lo más visto de la TV paga. Se sumó la comedia negra en desarrollo Anatomía, de los creadores de Club de Cuervos y Nosotros los nobles.
En estos últimos tiempos, SPT aceleró el desarrollo de contenidos de alto presupuesto y de baja o mediana cantidad de episodios. Sin embargo, el presupuesto para el TV sigue siendo una parte muy importante de su negocio. Hay telenovelas en desarrollo. “El melodrama sigue siendo un norte importantísimo. Estamos trabajando con varios escritores y saldrán nuevos proyectos al mercado” indicó Bond.
De hecho, ya está grabándose, entre Colombia y México, Ligeramente diva, la adaptación de Drop de diva. “Es un melodrama fresco de 60 capítulos y obviamente la adaptación a nuestra cultura implicó un poco de cirugía mayor para incluir aquellas cosas que para nosotros son valiosas, como es el caso de la familia” dijo Bond.
La ejecutiva también comentó que, tras la pandemia, hay más producciones, demanda y movimiento que nunca, lo cual genera complicaciones a la hora de reunir a los actores, los directores y conseguir el crew con el que se quiere trabajar.
Cuadrar agendas, conseguir el crew y apostar al proyecto correcto son los principales desafíos del productor. “Creo que ahora todo el mundo es productor, desarrolla y tiene un proyecto debajo del brazo. Nos llegan muchas cosas dentro de esa lluvia de proyectos y de ideas. Es un reto apostarle a lo correcto, discernir una idea de otra, navegar en esa lluvia de ideas y de proyectos que nos llegan a diario”.