Para Bruno Cardinali, director de Mercadeo Norteamérica de
Popeyes Louisiana Kitchen, la campaña BYOB: Bring Your Own Bun fue una acción
orgánica, apoyada por los consumidores desde las redes sociales, mientras la
cadena de restaurantes trabajaba en “recuperar” el sándwich de pollo.
“A pesar de que sabíamos por pruebas previas de los
consumidores que teníamos algo realmente bueno en nuestras manos —que a los
fanáticos les encantaría—, la locura por nuestro nuevo Chicken Sandwich superó
nuestras expectativas y nuestros fanáticos lo llevaron al siguiente nivel y nos
mostraron cuánto realmente aman a nuestra marca y comida” explicó Cardinali.
Popeyes invitó a sus clientes a traer su propio pan y con un
pedido de tres piezas de pollo, a hacer su propio sándwich. Para promover la idea,
la marca lanzó un video que muestra a los clientes que intentan resolver el
desafío.
“A nuestros invitados les encanta mostrarnos en las redes
sociales todas las formas creativas en las que les encanta amar nuestra comida,
desde hacer sus propias biscuits de pollo hasta crujientes muslos de pollo
bañados en puré de papas y salsa. Por lo tanto, queríamos ofrecer a nuestros
huéspedes una forma divertida de disfrutar nuestra comida en forma de
emparedado mientras trabajamos para llevar el sándwich de pollo oficial a
nuestros restaurantes” dijo.
La cadena de restaurantes repetiría la hazaña de campaña. “Desde
nuestro equipo de redes sociales entendemos que nuestros invitados comprendieron
el concepto y el objetivo de la idea. Por supuesto que nuestros invitados
anhelan y solicitan que nuestro nuevo sándwich de pollo regrese a nuestros
restaurantes, y estamos trabajando incansablemente para devolverlo lo antes posible”.