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Ericsson indicó que sus ventas netas ha crecido en un 10% interanual hasta alcanzar los 5.215 millones de euros, frente a los 4.738 millones de euros del segundo trimestre de 2018. Por otra parte, la firma ha obtenido beneficios de 171 millones de euros.
La división de Redes ha contribuido al crecimiento con un incremento del 17% en los ingresos, que se sitúan en 3.597 millones de euros. El margen bruto trimestral en dicha división ha descendido al 41,4% frente al anterior 43,2%, debido a factores como los costos de resolución de litigios y una reducción en los ingresos por licencias de propiedad intelectual.
La empresa advierte que, si bien los contratos estratégicos ampliarán los márgenes a largo plazo, el impacto negativo que se ha sentido en el segundo trimestre “empeorará durante el segundo semestre”.
“Vemos que el negocio en 5G está cobrando fuerza con los nuevos contratos y lanzamientos comerciales, así como también con las redes activas. Por ahora, hemos proporcionado soluciones a casi dos tercios de todas las redes 5G que han sido objeto de lanzamiento comercial” agregó en comunicado la empresa.
