En colaboración con el equipo de mercadeo de Kellogg Europa, Loop Brands creó una nueva identidad gráfica con la firma de Kellogg. El desafío para este proyecto fue recuperar la historia olvidada y hacer que los consumidores apreciaran el nuevo enfoque de la marca.
La historia de Kellogg se remonta a 1906, al igual que la del logo central, que desde entonces ha recibido solo unos cambios mínimos. La nueva firma de su identidad es el cambio más significativo en su historia, lo que juega un rol básico en cambiar las perspectivas hacia la marca que ahora adopta un acercamiento mucho más saludable. Esta identidad implica el comienzo de un nuevo capítulo, un nuevo futuro y una nueva dirección del negocio.
El fundador de la empresa, Will Keith Kellogg, fue uno de los primeros en revolucionar el desayuno como se conocía con la caja de cereal en 1906 y para diferenciarse de otros competidores colocó su firma en la caja. Luego esto se transformó en el logo de la compañía y se ha mantenido en sus distintas adaptaciones.
Estratégicamente, este cambio busca presentar la expresión más moderna de la emblemática firma, en lugar de hacer una restrospectiva. Keith Morris fue el tipógrafo que exploró las posibilidades y versiones de esta nueva firma. El cambio de color, de rojo a café, responde a la idea de generar una línea más saludable que se aparte de la línea de productos generales.