Virginia Mouseler, CEO de The Wit, señaló que las OTT como Netflix, que compran buena cantidad de ficción nacional, ayudan a producciones locales, no solo de EE UU, a viajar a otros mercados.
“Ahora con Netflix puedes tener acceso a dramas de países que jamás habías pensado y el lenguaje ya no es un problema porque cuentas con subtítulos”.
En su caso, ha recibido formatos de países que no son los de siempre. Tal es el caso de producciones provenientes de Lituania y de ficción de Estonia.
Para ella, la creatividad viene de todos lados. Aunque casi siempre son temas locales, también hay historias de corrupción política y de negocios.
“La cuestión es si el mercado es lo suficientemente grande para absorber un proyecto de gran inversión”.
Con respecto a los formatos de game shows latinoamericanos, la ejecutiva indicó que usualmente abren primero con el concurso, luego van con las celebridades y van cambiando a lo largo del programa. “Es tan vívido y personal, que es muy difícil presentarlo para los mercados internacionales”.