El crecimiento en la cantidad de suscriptores de Internet móvil en América Latina en los últimos años ha contribuido a la denominada “economía de aplicaciones”, para la industria de comercio y contenido móvil, lo que a su vez ha ayudado a crear un próspero ambiente para las emergentes, señaló el director de GSMA, Mats Granryd.
“Esto se debe en parte a que los operadores móviles han migrado a sus suscriptores con éxito a smartphones y redes de banda ancha móvil, pese a la mayor presión competitiva y regulatoria en distintos mercados de la región”.
Si se considera que en 2020 el 72% de los mexicanos usará dispositivos móviles, de los cuales el 85% lo usará para conectarse a Internet; en América Latina se estima que se crecerá de un total de 414 millones de clientes de telefonía móvil a 524 millones en 2020, convirtiéndose en la segunda región de más rápido crecimiento para la telefonía móvil a nivel mundial en ese período, después de África subsahariana.
Granryd destacó que LTE 4G cubre 60% de la región y alcanzará 80% durante 2017. En este escenario, los smartphones representarán 72% de las conexiones móviles para 2020.
El titular de la GSMA destacó la importancia económica de la industria de la telefonía móvil, debido a que el año pasado dio cuenta de 5% del PIB de la región. Solo en México, la industria móvil generó el año pasado US$40.000 millones en términos de valor agregado, representando casi 3,5% del PIB del país.