Pedro Pérez, presidente de Fapae
(Mari Cruz Cantalapiedra). Más de 750 millones de euros de pérdidas en el 2004 ha supuesto la piratería en España al sector audiovisual y más de 300 al sector de los videojuegos. Bajo el lema “La piratería es un delito. Ahora la ley actúa”, la industria audiovisual ha lanzado una campaña antipiratería que busca concienciar al ciudadano de que comprar o bajarse de Internet películas es como robar un coche, un móvil o un bolso. La nueva campaña de sensibilización, que será difundida en cines y televisiones, tiene carácter internacional pues los mismos trailers o similares están siendo proyectados en EE UU, Alemania, Bélgica, Holanda y Reino Unido.Aunque lo primero para atajar el problema son las medidas legislativas, para los principales perjudicados se encuentra también el que éstas sean efectivas y el que los ciudadanos se solidaricen y piense que están cometiendo un delito.Según ha explicado José Manuel Tourné, director general de la Federación para la Protección de la Propiedad Intelectual, el plan contra la piratería que recientemente ha aprobado el Gobierno ha tenido una “gran acogida” por el sector audiovisual si bien han expuesto al Ejecutivo tres medidas concretas de urgencia: “la creación de un comisionado que coordine la tarea de los 11 ministerios implicados; dos reformas legislativas específicas: una que sancione la adquisición de productos piratas (como ya ocurre en Francia, por ejemplo) y otra que adapte la Ley de Servicios de la Información para que los prestadores de servicios tengan un mínimo de responsabilidad sobre lo que ofrecen; y, finalmente, que se apoye esta campaña antipiratería”.Para Pedro Pérez, presidente de la Federación de Asociaciones de Productores de Cine (Fapae), las pérdidas de 750 millones de euros al año que sufre el empresariado audiovisual son “como para cerrar la tienda”. En este sentido, Enrique Cerezo, presidente de la Entidad de Gestión de los Derechos de los Productores Audiovisuales (Egeda), también recalcó que “cada vez hay más empresas que tienen que cerrar por la piratería”.En lo que va de año, los cines han visto cómo a sus salas acudía un 10% menos de espectadores que en el mismo primer cuatrimestre del ejercicio anterior, al bajar de 46 millones de entradas vendidas a 42 millones de euros, según ha comentado Ricardo Evole, presidente de la federación de exhibidores Fece.
