La Medida Provisoria para la industria audiovisual brasilera que fija, entre otros aspectos, reglas y obligaciones entre la Agencia Nacional de Cine (Ancine) y las compañías programadoras de televisión paga que actúan en territorio brasilero, tanto las nacionales como las extranjeras, se convirtió en ley en las últimas horas. Uno de los puntos importantes de la MP establece que las programadoras extranjeras están obligadas a depositar 3% de lo que remitan al exterior en una cuenta especial del Banco do Brasil, abierta por la compañía. Ese fondo estará destinado al fomento de la producción nacional.