Blockbuster, la cadena estadounidense de alquiler de videos, dueña de 37% del mercado argentino de películas hogareñas, pondrá en marcha a partir de 2001 una agresiva política de expansión para ampliar su posición. La firma, que ya controla 80 locales, 16 de los cuales se inauguraron este año, comenzará a ofrecer franquicias con la intención de consolidar su presencia en el interior. Hasta ahora todas las aperturas se financiaban con capital propio. En la actualidad, 85% de la red de tiendas se concentra en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, pero con la venta de licencias para explotar su marca planean sumar otros 80 locales en las principales ciudades del interior. Las franquicias costarán entre US$200.000 y US$300.000, y habrá un formato especial para dueños de videoclubes en actividad, que deseen integrarse a la operatoria de la cadena. Para éstos, el costo será de entre US$100.000 y US$150.000. La crisis del consumo no retrajo la actividad de Blockbuster este año, sino que, por el contrario, la incrementó: la gente gasta menos fuera de su casa, pero puertas adentro demanda con mayor intensidad opciones de entretenimiento, como el video. “La crisis ofrece una oportunidad escondida”, dice Alejandro Fava, vicepresidente de Blockbuster para Argentina y Uruguay, quien asegura que la empresa terminará el año con un crecimiento de 35% respecto de 1999. Otra de sus grandes apuestas para el 2001 será la incursión en el comercio electrónico. Blockbuster ya tiene en el aire un sitio web con información sobre películas y nuevos lanzamientos, pero utilizará el sitio para ofrecer un servicio de entrega a domicilio. Sus clientes podrán alquilar películas desde una computadora y recibirlas a domicilio en dos horas. Luego, también será posible comprar DVD, regalos, libros y toda una gama de productos alimenticios para consumir mientras se ven películas, como helados, snacks, gaseosas y golosinas. La tercera apuesta para el próximo año es un acuerdo con los distribuidores para incrementar en 200% la cantidad de títulos disponibles, cuando se trata de grandes estrenos. En vez de comprarles las cajitas, para luego alquilarlas, las tomará en consignación y repartirá con ellos el producto de su explotación comercial. Blockbuster llegó a la Argentina en 1995 y abrió su primer local en Salta. Para entonces funcionaban en el país alrededor de 8.000 videoclubes, hoy sólo quedan 2800.